Para: M.
Oye chico,
dime una cosa
ahora que vives lejos, !alguna vez me quisiste!
lo pregunto, desde lejos,
porque no tuve valor de cerca.
A veces, me duele la desesperación !chico!
a veces, las explicaciones, !lo comprendes!,
pero, !oye, chico!:
te imagino por Rampa Zara,
te evoco en mis cuadernos a cuadraditos
te escribo en hojas !blancas!.
Oye Chico, sabes lo que sucede cuando te recuerdo;
!prèparate!,
canto, cocino, me pierdo, aparezco,
escribo, estudio, voy al baño, regreso del baño, reniego, bebo, almuezo, te pienso, no sufro , !chico!, porque digo, es así, así serà; miento, sufro de a poquitos!.
!Oye chico!
?en alguna hora me quisiste?
!es una pregunta suspendida!
si ando por las nubes chicos es para alcanzarte.
!Oye chico!
te recuerdo en tu universidad,
saliendo y yo comiendo mi canchita y tal vez, arrancàndome el corazón! para regalártelo.
Porque me gusta el tuyo esparcido sobre el mio.
Como te explique, chico mio,
las alegrías terrenas, te recuerdan,
quizà es mi necesidad de amor lejano
por tí,
quizà es mi necesidad de amor cercano
por tí,
mi querido chico.
|