Tras los bramidos de tiernas ráfagas Vienen arrullos de tibios halitos Y escapan a vuelo las brumas La medrosa legión de pájaros Cantan a coro su amor las aves Ósculos mudos se dan los arboles Y baja del cielo a la tierra Un inmenso raudal de ternura.
Texto agregado el 11-04-2013, y leído por 155 visitantes. (1 voto)