Hoy no es mi mejor momento,
No se si será que ya la temperatura ha subido o que la sangre me hierve por si
El caso es que las ansias me gritan que he cometido un error,
Y mi piel opina igual,
Hoy he deseado que nos reconociéramos, que otra vez tus manos se confundieran con las mías, hasta no saber si soy yo quien te toco o son tus manos las que se mueven al ritmo de mis ansias,
Hoy simplemente he extrañado tu pecho sobre el mío, y la danza a dos hombros,
Hoy extraño amanecer enredada a tu aliento y explotar al mismo ritmo.
Quien iba a decir que al fin del cuento la mente es lo de menos, que la idea es la misma: la soledad no es lo que pesa.
Quien iba a decir que al final del cuento la piel es lo de mas, que la idea es la misma: la pasión, como adicción, es necesidad que me impide respirar, porque si fueras aire, serias todo el cielo que respiro.
Porque como muchas mujeres, lucho por mantener mis ideas a flote, por hacer que mi intelecto sobreviva, pero al igual que muchas mujeres al final nos convertimos en deseo.
Y hoy soy eso, deseo, hoy simplemente te deseo, no a tu tiempo, no a tu mente, hoy simplemente te deseo.