Tras los muros de cristal hay una figura mágica
indescriptible, casi imaginada, pero real
Es tu silueta magnífica la que deslumbra mi ojos tras la ventana.
No me pierdo ni un detalle y desde mi encierro vigilo tus movimientos, te palpo en silencio, dibujo tu semblante y hasta mis manos recorren tu cuerpo
una y otra vez con ansias de romper esta barrera milimétrica que nos separa
Grito preguntándome – seré afortunado al yo aquí estar encerrado en este cubo de cristal?
Estoy atrapado, estoy enamorado.
Estoy apunto de romper este muro e ir a tus brazos.

Pero desapareces...