En noche de lluvia, encanto y misterio,
tu dulce mirada se pierde en el viento;
refleja las gotas que caen del cielo,
miles a la vez y a un ritmo lento.
Sentada en el cuarto, junto a la ventana
mirando a lo lejos el atardecer;
un poco mojado, y frió por cierto,
y el azul del cielo, por desvanecer
Es tan solo el silencio único testigo,
de tus letras de amor, deseo y pasión,
y es la ausencia quien toca a mi puerta,
Llevando ese mensaje a mi corazón.
“Una taza de café, una bella sonrisa,
tú, junto a la ventana mirando llover,
Y yo, mientras tanto pidiéndole al cielo,
que un beso tuyo, quisiera tener”
|