Madura, dorado Trigo y pan delicado Amasado de ternura. Come, deléitate Con su suave sabor Que emana De sus poros, de su esencia. Deja pasar el calor Que al refrescar sabe más rico No te tortures es tuyo Yo lo prepare con amor. Para tu corazón delicado Tu abuelo me dio su si Y al campo yo fui. Ahora comprendes Que es tu estancia, Tu nostalgia pasara Un día serás feliz Con Micaela que te ama. Si lo serás y ella amasara Tu pan con más amor Y más presencia. Un día sabrás el porque De mi postura si me voy Alguien se encargara De contarte la historia. De tu nana que al verte crecer Se quedo para hacerte feliz. Un día ya no me veras Cuidando tu corazón Pues tendrás tú sanadora. MARÍA DEL ROSARIO ALESSANDRINI.
Texto agregado el 12-03-2013, y leído por 381 visitantes. (8 votos)