Mi abuela era una asesina. Mi abuela descuartizó sobre la mesa del patio el cabrito que yo tanto le cuidaba. Mi abuela ahogaba en un balde todos los gatitos que la gata tenía de más por ahí. Mi abuela les cortaba el cogote a las gallinas para hacerlas con papas al puchero. Mi abuela usaba los gorriones que yo entrampaba para cocerlos con polenta y salsa Mi abuela degollaba las ranas que cazaba para que al rato saltaran del satén al suelo. Mi abuela no mató al abuelo que vivió borracho y castigando. Pero igual quise a mi abuela.
Texto agregado el 16-02-2013, y leído por 283 visitantes. (9 votos)