Pensando en ti y las sombras.

Pensándote me encuentro,
nos busco, me pierdo,
te recuerdo extraviada,
nos extraño juntos.

Pensando en ti,
me acuerdo de tus cosas,
me olvido de mis razones para no extrañarte,
para desearte nuevamente conmigo,
después de todo...

Omito tus errores,
culpándome los míos,
por encima de tus fallas
si son culpa de las mías.

Me reclamo, me castigo.
Y esto ahora sirve de nada
en que te pienso lejana,
en que te sé compartida,
pero que no estas conmigo.

Pensando en ti te encuentro,
acompañada de otra sombra,
que no es la mía ni me pertenece,
pero que si fuesen comparadas,
me queda de sobra muy pequeña...

Porque dos sombras juntas,
nunca serán rebasadas,
por una sombra incompleta,
por otra sombra vacía.

Tal vez sirva de consuelo ahora,
para una soledad que me queda grande,
pensarte volviendo por los lugares,
que nos vieron antes juntos,
y ahora te ven distinta,
acompañada de otra mano
mientras la mía,
aun aguarda por tu sombra.