"Voy a ser sincera contigo.
Hace bastante que no tengo problemas para concentrarme,
para olvidarme del mundo e ignorarlo;
y escuchar el vacío de la incertidumbre,
el caos del vacío,
y la belleza del caos.
Hace mucho que no escribo porque las palabras ya no desbordan mis ojos.
Ya no zumban en mis oídos aquellas que logro retener en mi lengua.
Hace ya un tiempo que desafío las reglas;
mi límite no es el cielo, ya no importan las bardas;
en cualquier descuido tomo todo por asalto y...
sinceramente ahora no sé qué pasa.
Me dan ganas de escribir(te).
De hablar(te).
De pensar caóticamente en la incertidumbre
y en la belleza de tu vacío.
Tengo la boca llena de ti
de tus labios filosos,
como si aún mordieran.
Dejaste en mi cama tus células muertas,
tu esencia apestosa, dos colillas de cigarros,
saliva,
recuerdos ,
una erección.
Cómo saciar mi hambre de ti
si tu abrazo asesino
si tu cuerpo sublime
no está por aquí...
Quiero, sin pensarlo, más del veneno de tu boca.
Me rindo.
Tendré que regresar a las dosis de letras,
a succionar libros para volar…
Al café y al suéter para el frío
y a otro abrazo que me caliente.
No alzo la vista al cielo buscando esperanza, sólo seré sincera contigo: me quedé aquí, vacía, desubicada y loca."
04/02/13