Ha llegado, nena, el augurio de flores abiertas
El camino que bifurca tu mirada en discursos de esperanza
Ha llegado, nena
La tristeza que revienta en chispas de locura ágria
Tu instrumento que hace ruido en mi silencio
La música despierta en torbellinos constelados
La memoria dando saltos en el agua con hocico de estrella
Intentando morder un costado del futuro
Y la incertidumbre abraza ecos de aleluya en la inexistencia de tu voz
Bésame, en el último pendón de esta pavura
En el último candor que esta por reventarse
Dame el consuelo y la fuerza que no te pido
Y cree en esta farsa que se agarra del instante
Como un gato enamorado del vestido
Que me queda, nena, cuando todo esta por devestirse
Y los sueños como escarapelas aferradas
A estos tiempos submarinos
Se derriten con una sonrisa de nostalgia
Ha llegado nena
El viento, los estanques, las estrellas, el anuncio
Que realiza lo que esta perdido
En el encuentro de mi mismo
En la única salida de la suerte cuando se han cerrado todas las demás entradas
Y la muerte da la bienvenida
A las sombras embebidas de pasión salvaje
Ni se como me siento respirando el nuevo ciclo
Ni se como agarrar las riendas que la luz me ofrece
Ni se nena, como divertir este equipaje que me llevo tan vacío
Ha llegado o esta por sucederse lo imposible a mis temores
A lo que habla sin decirse con los gritos del destino
Y en el puente oscuro que ilumina lo que voy perdiendo
Aparecido en la calesa del centauro solitario
En busca de una rima que le de bautizo
pues ya esta por despedirse
Ha llegado nena y no se como más decirte
Que te quedes o te vallas
Quédate conmigo