En mi trabajo me olvido que todo está mal que todo funciona al revés de cómo debiera funcionar En mi trabajo no existen beneficiarios sólo deudores y patriarcas malhabidos Cuando estoy aburrido me mastrubo el baño y esparso el semen sobre la loza con olor a cloro pero nunca limpia En mi trabajo de vez en cuando me drogo escondido entre los espejos que vigilan lo que todos ven Todos están contentos en mi trabajo porque aunque no pagan bien el ambiente laboral es muy agradable Cuando llega la hora del café las tazas resuenan junto al sueño y la conversación se torna muy amena Sólo un milagro podría lograr que nos desencantáramos con este puto trabajo tan perfecto Los tentáculos segregados del reloj secretan lágrimas despojadas de humanidad Tus silencios amargos condenan mi ser filtrado por la cortesía infame de los saludos eternos
Texto agregado el 25-01-2013, y leído por 152 visitantes. (0 votos)