- Me representa una calle sin salida - continuo diciendo - donde el paredón del final tiene pintado una pequeña puerta escondida detrás de sus ojos, detrás de su mirada;
y en su boca la puerta se abre hacia un laberinto de abismos y profundidades, que con cada sonido de su garganta me ahonda mas en el sinsentido, y me pierde...
me pierde y no me encuentro.
- La cuestión es querer encontrarse -le dije tratando de evitar su mirada furtiva - Aunque no te guste esa idea..
- Uno no se encuentra a si mismo! - interrumpió enfadada - A uno siempre lo encuentran, porque uno siempre sabe donde esta parado, es el otro el que desconoce el paradero. Porque aun si no sabes la dirección exacta, o si es buenos aires o nueva york, estas segura que estas ahí, en esa esquina, al lado de ese árbol, adelante de ese edificio, adentro de ese corazón.
- Pero, ¿y si la acción de hallar no se aplica al espacio, sino a una subjetividad? ¿A mi subjetividad?
- ¿Por que haces preguntas tan estúpidas? ¿Como no hallarte en tu propia subjetividad? ¿Acaso eres omnipresente? - y lanzo una carcajada burlona.
- Si te dijera que la omnipotencia nada tiene que ver con penetrar las subjetividades, si no mas bien con desarticular el colectivo, te reirías con esa cara de tonta nuevamente y no se si podría soportarlo.
- Y aun así indirectamente me lo has dicho, como te deleitas con el sufrimiento hermano mio - me replico divertida.
- Tu hablaste de que no te encuentras cuando se larga a la parla, si no crees en la búsqueda de uno mismo ¿como acaso has dicho eso?
Pito una bocanada de su cigarrillo con esa cara seria que pone cuando se contradice a ella misma y se lo remarcan, pero no me dijo nada.
- Quizás - continué - sí te interesa saber en que parte de su corazón te perdiste, quizás quieras encontrar el lugar exacto que ocupas..
- NO - me interrumpió con ímpetu - si me pierdo es en el absurdo de su cerebro, no de sus afectos.... Me hila a un carrilete infinito que nunca deja de girar, el hilo no aparece acabarse, me ha atado cuidadosamente a todo lo que hay dentro de su cerebro, estoy tan tensada en los recovecos que siento como me voy ahorcando de a poco.. hasta me tiene contradiciendo me - su mirada enfoco el piso, sus labios curvaron su comisura, su voz se ablando y continuo - Quisiera decir que me siento aprisionada, pero ¿acaso la prisión no es algo horrible?
- ¿Te priva de tu libertad?
- Técnicamente si, pero presiento unas tijeras que rozan la tanza, amen de verme volar por los cielos cuando se cierren. - y sonrió cabizbaja. |