Eres la agonía insistente
el fin injusto de la ausencia
un recuerdo que no aparece,
eres ese domingo que no llueve.

Eres mi primer jardín pálido
el filo desconocido de la razón
un apareo de los labios,
eres el amor sin el cansancio.

Eres lo que no brotó y fue
el grito que solo yo escucho
un viaje sin amanecer,
eres la luna que no se deja ver.

Eres una cisura creciente
el corte que no dolía
una caricia impaciente,
eres lo único que el amor me debe.

Eres la palabra que no sabìa
el renglón que cubren tus ojos
un verso en insanìa,
eres todo lo que de mí moría.

Eres el vacío que has pedido
el silencio cubriendo la cama
un beso amanecido,
eres soledad enterrando suspiros.

Eres cien años de espera
el tren vaciando el andén
el mensaje sin la botella,
eres el hombre que fui…y éste que dejas.