Constricción literaria.

Viviré para adentro…
Pero quemaré en la hoguera del fastidio todos mis estrambóticos cuentos, y no diré nada más.

Que paradigmáticos eventos sean dilema para quienes caigan en recrearlos por donde quieran
Que su fantasía no dé liberación, sino locura contenida en la cabeza de cualquier sano juicio
Que un inicio sea fuga, la intriga víboras en otros estómagos, y el desenlace ahogo al extraño

Viviré para adentro…
Pero apagaré en el aire de la desidia todo vestigio de malogrados poemas, y no diré nada más.

Que natura quede, la planta crezca sin abono, y la belleza de la flor sin exaltación prestada.
Que todos mis sentimientos exuden por mi piel, y que un lejano llegar destruya mis dos pies.
Que la soledad queme mis ojos, la angustia aplaste mi pecho y el miedo sea mi parálisis total.

Viviré para afuera...
Siendo un tipo desnudo, palpable como cualquier persona solo haciendo sombra por la calle...