Su padre fue don Juan Bautista de Lavalle y Zugasti, quinto hijo del conde premio real, caballero de la orden de Alcántara y san Hermenegildo, brigadier e intendente de Arequipa, su madre fue doña Narcisa Arias de Saavedra, hija de don Francisco conde de casa Saavedra; don Antonio de Lavalle fue hijo único y heredero de tan aristocrática unión.

Desde muy joven demostró su amor al estudio, siendo una verdadera revelación su libro titulado “don Pablo de Olavide, su vida y sus obras” un interesante ensayo biográfico histórico sobre tan esclarecido como infortunado limeño; poco tiempo después funda con don Toribio Pacheco “la revista de Lima” publicación de carácter quincenal, que junto con el “mercurio peruano” son considerados como iniciadores de un gran movimiento intelectual.

En la “revista de Lima” publico excelentes artículos sobre O’ Hoggins, Antequera, Valdez, Abascal y la Perricholi, sobresaliendo con un estilo sobrio y castizo; luego incursiona en la política y en la diplomacia, fue diputado al congreso y representante ante las cortes Europeas por el año 1874, ese mismo año escribió y dio a la luz un libro titulado “comentarios constitucionales” sus grandes dotes de escritor y literato movió a la real academia de la lengua y de historia a nombrarlo su representante.

Don José Antonio de Lavalle y Arias Saavedra, tuvo una gran actuación en la vida diplomática principalmente durante la guerra con Chile, una gran labor intelectual y proficua, dejo de existir en esta ciudad de Lima en 1893; esta es a grandes rasgos la biografía del notable patricio limeño, que honro nuestras letras y supo defender al Perú con una inteligencia y patriotismo enorme.