Cuando mi alma este aplastada por las duras penas que me aquejan, y mi camino se oscurezca de pronto sin dejarme ver claramente las cosas… Cuando se derrumbe lo superfluo por el peso de lo perenne y duradero, y mi consumismo no pueda brindarme múltiples y variadas distracciones… Cuando ello suceda, quizás logre asimilar que la verdadera salvación, que tenemos como seres humanos es el amor, fuerza esencial de la vida… Quizás ese día mí supuesta debilidad haga que el amor reine en mi alma, dándole trascendencia a todo esto tan lleno de modernidad, y tan vacío… Quizás un día EL AMOR triunfe en este mundo tan maltratado… No perdamos la esperanza en nosotros que el hombre es capaz de todo… Siempre es posible cuando la Fe y el Amor son nuestros compañeros…
Texto agregado el 26-12-2012, y leído por 111 visitantes. (3 votos)