En una noche tan oscura que ni las manos se ven
voy recorriendo sobre mis pasos andados,
sintiendo el silencio que te acribilla
y los gritos callados que de mi alma brotan.
Me voy muriendo poco a poco
quemada en la agonía de un fuego inacabable
esperando el momento
que como ave fénix
extienda mis alas
y que el silencio y la oscuridad
se pierdan por ahora.
Texto agregado el 19-12-2012, y leído por 121
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Lectores Opinan
24-12-2012
Un grito Ahogado, pero siempre hay salida, por mas angustiados que estemos la mayoria de las veces la solución llega al último minuto!, Mis abrazos y estrellas LithiorelArkangelOscuro
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