—Espejito, espejito, dime ¿quién es el más bello de todos los hombres del reino?
—No sé.
—¿Cómo que no sabes?
—Pues la verdad es que no sabría decírtelo, porque no estoy capacitado para medir la belleza de los hombres.
—¿Cómo que no estás capacitado? Tú lo que eres es un espejo homófobo.
—¿Homófobo yo? En absoluto. Lo que pasa es que respeto la versión canónica del cuento de los hermanos Grimm.
—¡La versión canónica! La versión canónica es una trivialización pacata de la historia tradicional, que es un cuento de terror y sexo. ¿Dime quien es el hombre más guapo del mundo o te rompo en mil pedazos?
—Está bien. Te lo diré: el hombre más guapo del mundo es Viggo Mortensen.
—¡Ah, Viggo Mortensen, el medio argentino ese flacucho! Haré que lo maten y que me traigan su corazón en esta caja y a ti, te cegaré los ojos, maldito espejo.
Juan Yanes
Texto agregado el 19-12-2012, y leído por 139
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