SONETO
Señor, resultó lo que yo menos quería
Y oye mi alma, desconsolada, llorar;
tu Voluntad se hizo, contra la mía
y es tan difícil poderla olvidar.
Dios mío, ya me quitaste lo que yo más amaba
y amar así, a otra, no creo poder.
Que me quisiera, como hoy yo a ella, trataba
mas tu Voluntad no era esa y ya no pudo ser.
Dios mío, no es capricho ni menos obsesión
te lo aseguro, por cada latido de mi máquina,
llamada así por todos los que aman, corazón.
Hoy te pido, Dios mío, lo que ayer ya te pedí
dame el amor de mi amada, para poder morir,
por que no he muerto, pues nunca viví.
|