Tergiversaré textos intangibles
Trataré de día a día hacer utopía
Y extirpar de mi lecho mis huesos
y hacerlos enteros y eternos.

Caminaré descalzo por la lava ardiendo
Por el cemento muerto y sin vida.
Cosecharé alegrías en repentinos sucesos
En un beso de aquella o de ella, que no es la misma.

Respiraré en la penumbra de la luna
Y en la tortuosa ciudad, peor que ninguna.
Cometeré actos inmorales y anormales
Que atenten con la mente de ese ser.

Ese ser que me revivió en vida
y me enterró en esta misma.

Haré resplandecer con fulgor
el agrio sabor de un beso mal dado.
Un beso de esos que se dan,
Pero se dan sin amor.

Haré de una triste canción,
una canción de cuna
Como no hay ninguna
Ni habrá jamás.

Cuando anochezca abriré las cortinas
y ya no veré el mismo sol, sino las estrellas
Y contaré cada una de ellas
Hasta el fin de mis días y existencia.

Y allí, recién allí, diré al resto de mortales
Que yo no soy uno de ellos.
Sino que me volví eterno, entero y etéreo.
Salud.