Harne está de visita donde su amigo Hans. Este es lleno de ocurrencias y se le ha propuesto que hay una conjura para que el ser humano sólo utilice la cuarta parte del cerebro o menos. Le dio por sacar esa teoría porque el hijo de un senador sufría el síndrome de desatención. Puso a Hans a escribir con el pié, con la mano izquierda y con el pié derecho. Como no pudo le dijo que estaba operando con menos del veinticinco por ciento del cerebro. Todo se le confirmó más a Harne cuando se diseñó unas clavillas y a cada una le puso dos colores y un número y puso al niño a que con el pié cogiera la clavilla tal con los colores tales y la pusiera en el número tal. Logró, en un período de 6 meses, que el niño memorizara sin repetirle 25 informaciones y eso es más que lo que hace un niño normal. Actualmente el otrora niño es diseñador industrial y cineasta. Se graduó con honores en la mejor universidad del país. Harne muy entusiasmado se puso a escribir con la mano izquierda y pasó todos los tomos del Quijote de la Mancha de Miguel de Cervantes Saavedra. También dibuja, con plumilla y con el pié derecho. Con el pié izquierdo no ha podido porque dice que es muy bruto y sin embargo bosqueja con él.
Hans salió entusiasmado a practicar con ambos pies y con la mano izquierda.