SON TUS PERJUMENES...
No ; no lo sabia, Y... ¿Desde cuando se dejaron. ? Pregunto extrañada Teresa , su vieja y confidencial amiga desde el bachillerato.
Hoy hace una semana que no se nada de su vida pero estoy destruido . Fueron mis cinco años más intensos, yo nunca había tenido a nadie que pudiera amarle tanto Le decía con voz entre cortada y ronca filtrada por el nudo que se le hacia en la garganta.
Lo que no entiendo es que si ustedes se amaban tanto, ¿ Cómo es posible que se hallan separado así. Tan de repente. ?
Quisas mis celos . O mis olores...
¡ Tus olores No entiendo eso de tus olores.. Le dijo Teresa haciendo un gracioso gesto con su cabeza.
¡ Si De los olores que expelemos e inhalamos y presiento que a causa de esos olores han sido los triunfos de mis conquistas y de mis fracasos .
Sigo sin entender confeso Teresa esbozando una simpática sonoriza .
Bueno, ¡ Eso de los olores lo intuyo.. Porque es difícil que uno pueda sentir sus propios y sutiles olores, pero si he podido aspirarlos de algunos de mis pasados amores, esos que han acompañado pedazos de mi vida .
Roberto, Robertico, ¡ ahora si que te entiendo menos Dijo la mujer moviendo la cabeza en señal negativa .
Te confieso que no siempre he podido aspirar y disfrutar de ese perfume, de esa embriagante fragancia que se expele cuando se hace el amor. En ese fugas y, a la vez , infinito instante cuando se nos une el cielo con la tierra , ¡ Si En ese momento místico sale de su interior por su jadeante aliento
¿ Perfumes desconocidos ? ¿ Aromas celestiales, propias de dioses del Olimpo ? Pregunto Teresa en tono sarcástico.
No. Son aromas cotidianas, comunes olores. A coco tierno. A desinfectante quirurgico , un perfume de salud y limpieza, a césped recién cortado, salvaje e excitante. A piña, suave e inquietante . Cerveza negra y amarga, borrachera de placer .
Si, tienes razón, yo también he sentido de esos olores en el aliento de algunos hombres de mi vida pero no les había puesto atención Expreso, Teresa, con melancolía, y continuo También disfrute de algunos incoloro, y también insípidos, que justificaron las rupturas pero, ¿ Porque de la de ustedes..? ¿ Los celos , los olores? Pregunto con cariño.
Quisas yo agote el amor de tanto amarle..
¡ Si Contesto la mujer abruptamente También puede ser que te entregaste todo, saciaste la sed y, amigo , nunca le calmes completamente la sed a nadie ..¡ Por muy bien que huelan Siempre es mejor dejar un poquito de reserva , dejar un poco sedientos a los demás, es preferible que se sientan mas necesitados de ti que agradecidos por que , cuando se acaba la dependencia suele terminarse el amor Teresa le tomo la mano con cariño en señal de solidaridad .
No se Murmuro Roberto, con la misma voz obstruida por el nudo que se formaba en su garganta y, por su tono, se adivinaba la falta de auto estima Tal vez dejo de sentir mis cautivantes olores Continuo y comenzó a percibir el extraño aroma que despiden mis pies, o mis poros dejaron escapar el olor penetrante y acido de mi sudor o, el edor de la grasa rancia que despiden mis cabellos y que embadurnan mi almohada, o el fétido aliento de mis malas digestiones expedidos directamente a su cara cuando dormíamos ¡ Si Todos esos olores se confabulan y aparecen para matar el amor; uno a uno van atacando , van menguando la capacidad del olfato para detectar los olores afrodisiacos que expelemos para la conquista Silencio, Teresa poso sus ojos en imágenes de recuerdo y a Roberto se le aguaron sus ojos.
¡ No No puedo dejar de amarle... Luis Alberto es el único hombre que he amado realmente Grito Roberto, sin poder reprimir el llanto .
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