VARGAS LLOSA
Hace annos en la facultad atino muy bien, a mi parecer de entonces, un catedratico de literatura hispanoamericana cuando afirmo que si bien Vargas Llosa era un novelista magnifico dentro de la literatura en espannol, no lo era tanto como cronista periodistico.
Pero aunque entonces estuviera yo de acuerdo con esta afirmacion, compartiendo tambien una opinion parecida respecto a los articulos que desde hace annos han ido apereciendo en EL PAIS, tuve que reconocer interiormente que no me perdia ni uno, que salian-y siguen saliendo-mas o menos a eso de una vez al mes, en la edicion de los domingos de dicho periodico.
Y ciertamente he sentido frustracion a lo largo de los annos con las coordenadas politicas de Vargas Llosa, con un cierto conformismo de elite que debio de percibir tambien mi profesor.
Y sin embargo, todos los domingos recuerdo las mannanas en alguna terraza con la edicion empresa, o alguna tarde languida de calor despues de un breve suenno, y despues hasta hoy en dia con el ordenador. Y cada texto era una especie de aventura intelectual-moral por los vericuetos del ser humano en alguna manifestacion o artistica, literaria-intelectual o politica, asi guiado de la mano del autor.
Y pienso en su obra, para mi, monumental, La Orgia Perpetua (1975), y la recuerdo ahora casi como una contemplacion antropologica a traves de la critica literaria, del vivir humano de un momento historico en concreto-totalmente contemporaneo, por cierto- que es tambien un resumen muy acertado del conflicto psicologico-vital del individuo y su paso por la vida en la Tierra, hoy y desde siempre.
Y entrado ahora en una fase de cierta senectud-el y todos nosotros-no dejo de contemplar mi propia vida como un “frenesi perpetuo” en un sentido intelectual-vital, un festin de continuo asombro respecto al ser humano y la vida.
Y ahora comprendo el porque he sido lector asiduo tambien de las cronicas del Sr Vargas Llosas, de tal forma que me reconozco, no tanto-o no solo-en el contenido de los textos, sino en el modo de vivir del autor, y su postura vital.
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