Dejè que el viento
recorriera tu cuerpo,
desordenara tus cabellos
y yo borrè todos tus recuerdos.
Dejè que el sol
evaporara el agua y esperè
una lluvìa que me acariciara,
dejè que encendieras la hoguera
y me dejè devorar por el fuego.
AUTOR: PEDRO MORENO MORA
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Texto agregado el 30-10-2012, y leído por 591
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Lectores Opinan
30-10-2012
Todo se lo dejaste a la sacerdotiza del amor. ¿Cuál de los dos era la víctima propiciatoria? Saludos Nestor felipeargenti
30-10-2012
Un trabajo digno de un mago, los elementos al servicio del amor. 5* lider_de_masas
30-10-2012
los elementos y los sentimientos fusionados.***** MARIAELENA