Imperio desolador




Horizonte severo con sonido hueco.

Lejanía gris que mudas de forma
Cuando a la Hermita te acercas,
Que no conoces el plato de migas,
De migas que son del color de
La tierra maciza, que son
Consuelo de los desprevenidos.

La neblina del alba plana
Que abarca todo mi ser,
La que hace que de tarde
La luz extrema quiera cegarme.

El astro Sol que trepa temprano,
Y se derrota cuando el imperio
Que derrocha espanto,
Es atrapado por las sombras
Invisibles.


Aguadulce, septiembre de 2012
José María De Benito