Mirada vacía, rincones sin vida, sed no saciada, vientos sin brisa. Flores sin fragancia, sol sin calor, girasoles que no miran. Noches sin luna, luciérnagas que no titilan. Estrellas que no iluminan. Amaneceres que no comienzan, atardeceres que no terminan. Naturaleza opaca que me acompaña. Horizonte muy lejano, cumbres perdidas. Arboles quietos no mecidos por el viento.
El día superfluo se pierde en la diversidad de la vida.
La seducción se desvanece sin ceremonia, la copa vacía escapa al brindis, sólo se unta la realidad, la dualidad supera.
Las hojas se secan sonríe el otoño.


La escritura es mi terapia, no se si es literatura,simplemente saco la marea de tristeza que estoy viviendo.