Muchas veces creemos que dejamos de sentir ciertas cosas, que de repente desaparecieron o se convirtieron en nada y muchas veces nos equivocamos cuando creemos que sentimos algo y no es así. De repente y cuando menos lo esperas esas sensaciones que pensábamos olvidadas o tal vez dormidas o puede que hasta inexistentes, vuelven a renacer. Entonces realmente nunca estuvimos seguros de nada, quizás si, por demás, y esa misma razón nos llevo a reprimir.
La mayoría de las veces me dejo llevar por mi percepción, suelo no equivocarme, me gustaría que por lo menos fallara una vez, esa fucking percepción… En fin, también suelo dejar viajar tan lejos mi imaginación que termino distorsionando la realidad y llego a desorientarme tanto que pierdo la noción de los tiempos, etc. Pero, en ocasiones analizo y reflexiono demasiado, hasta el punto de desear arrancarme las neuronas, lo bueno, es que saco buenas conclusiones (a veces) y la última fue: de que forma tan extraña actúa el inconciente que de manera inusual tal vez buscamos lo que sentimos que merecemos, Ej.; si siempre fuimos personas desinteresadas por los sentimientos de los demás (relaciones amorosas) si dañamos a mas que a una persona, si de verdad fuimos fríos… porque justamente nos enamoramos de la persona menos indicada? De alguien que sabemos desde el vamos como termina la historia? O mejor dicho, nuestros corazones hechos trizas… Quizás porque “inconcientemente sentíamos que merecíamos sentir lo que era tener el corazón roto!”. Se dice que todo lo que va vuelve, que siempre hay deudas que pagar. El amor no es un negocio y no se negocia, pero todo tiene su precio, no? Como digo siempre, de toda experiencia se saca un aprendizaje. Cuando pierdo la razón, cuando me pasan cosas que no logro entender, cuando me siento perdida, recuerdo eso… la vida es vida, sea lo que sea que toque hay que aceptarlo. No se puede vivir sin amor, tampoco se puede vivir de él. Y lo que mas me motiva para seguir sin mirar atrás, es que últimamente estoy haciendo las cosas bien, ya no tengo que rendirle cuentas a nadie y se que la persona de la cual me enamoré esta vez, vale la pena en su totalidad, aunque justo me vine a enamorar en el momento menos oportuno, ja! Pero bueno, cada instante es inesperado… Muchas veces creemos que dejamos de sentir ciertas cosas, que de repente desaparecieron o se convirtieron en nada y muchas veces nos equivocamos cuando creemos que sentimos algo y no es así. De repente, te podes dar kuenta de que en realidad no te volviste a enamorar, que eso pudo haber llegado a suceder, porque habia varias posibilidades, pero que en fin, no sucedio... Fue sólo amar a la persona, no a su corazón.
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