El sueño de una niña puede convertirse en algo sin igual.
Tan sólo recuerda que tu magia está en tu yó.
Mira los libros escondidos, aquellos que nadie sabe leer y observa que tú si los puedes entender, y entonces esa magia que tienes, esa misma magia convertida en deseo transformará todo tu ser.
Una noche vestida de seda descubriste que querías ser princesa, algo en tu edad normal, tan sólo una niña sin nada más, pero con un poder enorme dentro de tí que nunca entendiste, pero el cual te gobernó hasta el final.
Las fuerzas de ese deseo lo llevaron a cabo, y al final tu sueño se cumplió.
Con tan sólo dieciocho años en princesa te convertiste, más no podías entonces entender que aquello te pudiera ocurrir, porque esa noche todo en tí se transformó y tu vida un cambio en sí ejecutó.
Los libros del pasado a los que fácilmente accediste se abrieron de nuevo ante tí y entonces entre líneas tu existencia entendiste. Tranquila mi niña ahora duerme en paz, que mañana una preciosa princesa y una poderosa bruja se unirán para la eternidad.

Escrito por Carlos Them

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