Para conocer la legalidad de las cosas muchas veces hay que investigar el origen de ellas y la causa por la cual surgieron. Precisamente eso trataremos de hacer con el tema de los diezmos para comprobar su legalidad o no en estos tiempos.

En le libro de Números – Capítulo 18:20-24 dice: El Señor le dijo a Aarón: «Tú no tendrás herencia en el país, ni recibirás ninguna porción de tierra, porque yo soy tu porción; yo soy tu herencia entre los israelitas.
»A los levitas les doy como herencia, y en pago por su servicio en la Tienda de reunión, todos los diezmos de Israel. Si los israelitas volvieran a cometer el pecado de acercarse a la Tienda de reunión, morirían. Por eso únicamente los levitas servirán en la Tienda de reunión y cargarán con la culpa de los israelitas. El siguiente es un estatuto perpetuo para todas las generaciones venideras: Los levitas no recibirán herencia entre los israelitas, porque yo les he dado como herencia los diezmos que los israelitas ofrecen al Señor como contribución. Por eso he decidido que no tengan herencia entre los israelitas.»

Según vemos en estos versículos a Aarón Dios le declara que en la repartición de la tierra prometida al pueblo de Israel a él sus parientes los levitas no le tocaría nada y le dice que EL es su porción y tu herencia.
¿Por qué Dios hace esto? Por la siguiente razón, los levitas (los descendientes de Levi hijo de Jacob o Israel) habían sido escogidos como la familia sacerdotal que se encargaría de todo relacionado a los asuntos del templo de Dios. Y Jehová quería que se dedicaran solo a sus asuntos y para que tengan tiempo no le dio tierra, para que no siembren, no críen y no tengan otra actividad que la del servicio a Dios.
¿Cómo Dios resuelve lo de la alimentación de los levitas? El pueblo de Israel estaba compuesto de doce tribus que eran los descendientes de los hijos de Israel o Jacob, a cada tribu se le repartió su porción de terreno con el compromiso de que debían sacar el diezmo de lo que produjera esas tierras y entregársela a la tribu de Levi que no tenia nada, aparte de no tener nada era la familia encargada de los asuntos del templo o de Dios. La sumatoria de los diezmos de las once tribus daba como resultado la compensación de los levitas.
Todo esto es parte de las leyes del pueblo de Israel y el diezmo en específico es un método muy difícil de aplicar a alguien que no sea ese pueblo, que recibió una heredad con el compromiso de sacar para sus hermanos levitas la decima parte del producto.
En la actualidad el diezmo en vez de acercarnos a Dios nos separa, por lo que dice Gálatas 5:3-4 De nuevo declaro que todo el que se hace circuncidar está obligado a practicar toda la ley. Aquellos de entre ustedes que tratan de ser justificados por la ley, han roto con Cristo; han caído de la gracia.
El que practica una ley esta obligado a practicar toda la ley y el tratar de justificarse por la ley se separa de Cristo y cae de la gracia.

Que Dios aumente nuestros conocimientos para adquirir la vida eterna.