miraba el piso desde el quinto piso hormigas con alma circulaban dominios brillantes sentí alas un hambre de libertad salté si permiso y caí sin parar... no recuerdo mas nada tan solo el ruído de la noche apreciada por un hombre le miré era mi alma... la historia no termina miles de hormigas pululaban rumbo a la nada donde no hay sol ni estrellas tan solo el silencio y una noche sin sonido ni estrellas...
Texto agregado el 21-08-2012, y leído por 187 visitantes. (1 voto)