Sé que me gustas porque el agua de la llave es ahora más dulce muy dulce insoportablemente dulce Tanto así que nadie la podría beber nadie excepto yo Pondría la boca en la mañana bien temprano con las gallinas y estaría toda la tarde tomando enchufado como manguera El agua se me saldría por las orejas los pies se me pondrían azules los niños vendrían a verme y seguiría bebiendo hasta que ya no quedara más agua en el mundo y tú tuvieras que venir hasta mí sin otra alternativa sólo para saciar tu sed y yo todavía seco la mía
Texto agregado el 18-08-2012, y leído por 213 visitantes. (4 votos)