La voz se corrió, todos en el pueblo sabían que en Diego se podía confiar. Primero fueron sus amigos los cuales desahogaban en él sus más pecaminosos secretos, después los amigos de sus amigos, para finalmente terminar con toda una población. De rostro amable y comprensivo, siempre se hacía de tiempo para escuchar a la gente; sinceramente le gustaba, no por el morbo de conocer lo oculto y secreto del otro, sino más bien, por la sensación de bienestar que se creaba tras la aireación.

En muchas ocasiones Diego sufrió pruebas de fuego, personas interesadas en conocer ciertos secretos del otro, le ofrecieron elevadas cifras de dinero, pero nunca aceptó nada. Aquel muchacho de ojos pardos y cabellera crespa, nunca defraudó y delató a nadie.

Un verano, Claudia, su amiga de años, le confesó que había dejado de amar a su pareja, y que mantenía una relación paralela con un compañero de trabajo; Diego se tomó el tiempo de aconsejarla y escuchar atentamente cada palabra de su amiga, Claudia después de aquel encuentro con su amigo sintió un desahogo tremendo, un verdadero renacer, agradeció el tiempo y partió rumbo a casa.

Después de haber terminado hace aproximadamente tres horas la conversación con su amiga, Diego siente un fuerte golpe en la puerta de su casa, estremecido se dirige a abrir, para sorpresa suya, se trataba de la pareja de Claudia, quien de forma descolocada venía a exigir que revelase el nombre y lugar de trabajo del amante de su cónyuge. Diego como acostumbraba no lo hizo, de él no salió ninguna palabra.

Aquel hombre traicionado, colérico y enloquecido no soportó dicha situación, empuñando su mano lanzó un golpe de tan fuerte magnitud ,que de manera inmediata desestabilizó a Diego; una vez en el piso, lanzó tantas patadas en su cabeza, que tras cuatro minutos de golpiza perdió el conocimiento. Al reaccionar, el sujeto escapa a refugiarse con sus amigos.

Al conocerse aquella desgracia, el pueblo no quedó indiferente, se comentaba en general de lo impresionante que le pasó a Diego, si prácticamente era el sujeto más querido de todo el sector.

Pasaron siete meses, durante ese tiempo las personas del pueblo empezaron a vivir en un pequeño caos, las relaciones interpersonales y la empatía se vieron menoscabadas a tal punto, que ya nadie platicaba con nadie. El pueblo se lleno de recelo, se incrementaron los enemigos y la violencia se volvió cotidiana.

Hace tres semanas se corre un rumor, dicen que Diego volvió, que Doña Carmela le reveló un secreto; aquella mujer señaló que se encuentra intacto, con las mismas energías que hace siete meses.Y así fue, en un par de días todos regresaron a él, se liberaron de esa angustia tremenda y Diego, como acostumbraba, nunca comentó nada a nadie.

Lo que desconoce aún la gente ,es que el muchacho en la actualidad guarda los secretos tan firmemente, no por tener las mismas intenciones que antes de la golpiza, sino más bien, porque es el producto del traumatismo encéfalo craneal que afectó directamente a su memoria, por lo mismo, ahora olvida todo y no retiene nada, ya no se esmera en ejercer el bien, si sabe que de igual manera saldrá perjudicado. La gente de igual manera lo busca, por que la gente se necesita. Ellos no se preocupan, porque ellos saben que los secretos estarán bien guardados, mejor dicho, ahora estarán bien olvidados.

Diego ya se siente utilizado.

Nunca nadie entendió que a Diego sólo le importaba su vida y no la de los demás.