Hablar de la vida repasar las brevas de recuerdos que te asaltan -años ya perimidos- Fenecer de nuevo exprimiendo el tiempo en que despierte la memoria y allí, en su esplendor esperar que dé frutos mientras que al fin el pájaro entonces vuele sobre tu cuerpo de mujer.
Texto agregado el 11-08-2012, y leído por 206 visitantes. (3 votos)