Sintiendo una mirada tuya fui en busca de una caricia,
Logrando esa caricia ansiada me detuve a buscar un beso,
Después de un beso tuyo quise hacerte mía
Y al hacerte mía el amor se conjugó con el placer y la seducción
Intente quedarme contigo pero ya te habías ido

Y fue una mirada tuya la que me envolvió,
aquella que me fascinó y me hechizó

Y fue esa caricia, un acto celestial
lleno de paz de serenidad

Y fue ese beso que abrumó mi alma,
que estremeció mi cuerpo y me aniquiló
Y fue ese mismo que tanto mi espíritu deseó
Que en un segundo se llevó mi aliento y detuvo mi respiración

Y fuiste mía una noche, inundada de caricias
Una noche en mi cama, en la que me desesperaba por quitarte la ropa
Una noche en la que me apasionó tu piel más de lo normal y enloquecí de solo sentirte cerca
Fue una noche que te tomé contra la pared de mi habitación y te retiré la ropa
Besaba tu piel, la sentía mía y el placer era la seducción de la que me hice preso

Y te fuiste cuando quise entregarte mi cielo, cuando quise darte mis sueños, cuando quise la eternidad contigo

Lamentablemente te fuiste…y me destrozaste el alma.

Ahora entre tanto dolor intento sanar mis heridas a la luz de la luna y el sol
Ese sol que vio nuestros ojos, nuestras caricias y nuestros besos
Esa luna que vio como fuiste mía y como partió mi amor.