Patricia, gata loca, una gata surrealista,
ha tenido un sueño que la puso pesimista
y como es una gata consentida y extremista
ronronea en su arena con afán y con ahínco
La gatita, preocupada, madruga y se desvela
y consulta a una brujita que vive en Venezuela
el significado de sus sueños abruptos y tortuosos
que no la dejan gozar de un descanso bien sabroso
donde aparezcan peces, que representan dinero,
y perritos bonachones que sean amigos sinceros.
La bruja le encomienda cenar perros calientes
brincotear por todos lados justo al anochecer
y hacerse acariciar por mucha, mucha gente,
cosa nada difícil, pues sabe hacerse querer.
Dicho y hecho, la gatita pronto “se atapuja”
de perritos calientes y caricias a montón
tal cual como le encomendó la bruja
y cae rendida en su arena, a los pies del sillón.
Llegada la madrugada, nuestra gata se levanta
a navegar en la red, deseando buenos días
regalando a todos muchas alegrías
y riendo de sus locuras a toda garganta.
Esta noche la gatita para asegurar el sueño
dará un rico paseo con Ricardo, que es su dueño,
y saltará, cazando a uno que otro pajarito
para regresar a casa y tener sueños bonitos.
Y así, curada y feliz dando muchos retozones
navegando en la red en este nuevo día
sale nuevamente a despertar pasiones
y a desear a todos salud, paz y alegría.