Que silenciosa y quebradiza llega tu señal, más quisiera ser seducido por tu aroma, extraño hechizo que me mantiene cautivo . . . Recuerdo que alguna vez nuestros besos, me dejaron sin aliento . . . Si bien reposan impacientes, su calidez traspasa toda barrera . . .
Texto agregado el 01-08-2012, y leído por 286 visitantes. (1 voto)