.. y ayer me saqué el conector que une el asiento del auto y el culo, y eché a caminar por la plaza Aníbal Pinto con la bruja, que se recordaba de cuantas veces no la esperé ahí mientras bajaba el colectivo desde su casa en Rocuant. La plaza quedaba a tres cuadras de la mía, subiendo por Cumming, mi ventana era una palco a la plaza El Descanso, y digo palco cuando pienso en los Carnavales Culturales de la Ex Cárcel, cuando para también un año nuevo la bruja dormía en la mañana y yo me fumaba un cigarro en la ventana, y vi el guanaco de los pacos mojar a los aun parroquianos de esos años nuevos tan extremos... El Meckle dormía en la casa de enfrente, nunca supimos porqué se quedó ahí con el Pollo y la Ceci, pero lo tuvimos que ir a buscar... Ayer tome la bifurcación y subí al Cerro Concepción, el Valparaíso bonito y cuico, lleno siempre de jóvenes extranjeros, minas en un british english comentando donde iban a carretear en la noche, muchos "Boutique restaurant", que no entiendo el concepto aun, pero filo... las calles están donde mismo, las antigual casas que se caían a pedazos por los años y la poca mantención hoy se yerguen como hoteles y hostales very tipical... es cierto, todo está muy lleno de vida por allá... una vida un poco plástica quizás, un poco harto cara también... no quise entrar a tomar once en uno de sus cafés tan modernos por temos de ser asaltado... por sus precios obviamente... cuando la vida se tornó tan ridículamente comercial? Siempre, en realidad, el patrimonio siempre hubo que pagarlo... igual seguí caminando por Lautaro Rozas hasta el Alegre, que es más fome que chupar un clavo... me compré una Kem Piña porque el pollo arvejado con papas fritas del Marco-Polo estaba muy salado... De repente unas gotas me mojaron la zambeca... -Está lloviendo? Está lloviendo!! - me reclamó la bruja - Y sin paraguas...- fue su remate... LLuvia- dije- esto no es lluvia... y si lo fuera, aprovechala... No hay nada mejor que la lluvia, pienso... la gente la asocia a resfríos, a ropa mojada, a incomodidad... pero la lluvia es sólo un fenómeno climático, es algo que no se puede evitar por lo demás, y, mejor aun, es divertida... sana el cuerpo y el alma, como el Mentolathum o el Huira Sacha peruano... Y seguimos caminando no más, hasta que aparecimos lejos del Brighton, en el Ascensor Reina Victoria, bajé por las escaleras llenas de basura y caca de perro, aquí en estas escaleras estaba una noche con alguien que no recuerdo muy bien, fumandonos un cigarrito y los pacos se llevaron a un curadito que estaba durmiendo al lado nuestro... y de pronto de la nada estábamos en el Gato en la Ventana, mira, bruja, te acorday? El Jaime, el dueño, antes siempre estaba afuera, ahora no... Una vez el Handry le pegó por huevón, por pegarle a una perrita que teníamos arriba, en la plaza El Descanso, la Boba... y al Handry lo echaron cagando del local, y yo, curao, salí con él, y el Caezón tambien... nos fuimos a la casa y no sé que pasó después que no podíamos poner música, el computador tiene un sensor de curaos, jajajaja... mira la cara y funciona, si no, no...Ponte la Radioneta, música de las profundidades, de los pescaditos, jajaja... negro weón, encera la casa con veneno pa las pulgas mientras canta Eduardo Gatti... Te acorday vieja? Cuando me venía de tu casa y estábamos pololeando... yo llegaba y el Pollo estaba en la ventana... con una luca cada uno y la guitarra hacíamos flor de carrete... Pero eso ya no pasa más... nosotros nos casamos y nos fuimos, y el Handry volvió a su Isla de Pascua, el Pollo y todos también se fueron con los años... Y nos vino la madurez, la familia y todo eso... Y ahora todos son recuerdos, todo es más caro, ya no hacemos carretes con una luca y una vihuela pa tocar una wena... Ahora murió Facundo Cabral, y los cabros del taller me dijeron que si iba a volver a tocar el Tren de la Muerte, y yo les dije que no, que el Ferrocabral murió con él... Y no llovió al final, las calles estaban donde mismo, pero la verdurería del chico éste ya no estaba, ni el Bitácora parece, y el Dominó aun venderá esa chorrillana salvadora? Mira, vieja, en ese mirador arriba de la casa nos ibamos a conversar con la Pocahontas, con el Loco Aldo, y el Pájaro, que ni hablaba, se murió, pobrecito... Llegamos de nuevo a Condell, son los mismos perro de hace tantos años?... Mejor nos vamos, dije yo... son muchas cosas ya, siento hasta el olor a asado y no me aguanto...