Podría decir que tengo serios problemas de bipolaridad...quizá no, quizá si...en realidad no lo sé.
Para ser franca, ni siquiera me interesa.
Solía interesarme hace unos minutos, pero ahora, me resbala.
El haberle dicho que le amaba, fue la gota que colmó el vaso.
Maldito sea el día en que lo conocí, en que me dirigió la palabra, en que me miró con esos ojos.
¿Maldito o bendito?
Bendito.
¡Oh bendito sea él por hacer de mi una mujer!
Por enseñarme a amar, a aferrar y a desear.
Bendigo su existencia, aunque me ha lastimado.
Me ha lastimado con el mas doliente puñetazo de la desilucion .
Oh como quiero que sufra, que se queme con su propio veneno, pagarle con la misma moneda sería poco, le pagaré con billetes.
Pero lo amo y lo bendigo, pero no ya no, aunque me da igual lo que haga, lo que diga o lo que deje de hacer, me da igual si existe o no, pero mientras exista , deseo que sufra en el mas oscuro abismo.

Creo que estoy sufriendo una grave bipolaridad de sentimientos, pero no, no, creo que no.

No lo sé, ni me importa.