Nazareno, ¡Qué amor gratuito¡
desde una sonrisa, hasta tu vida.
Esto indica que nuestra conciencia,
retiene pigmeos que limitan.
Habitas más allá del bien y el mal,
practicas tu perdón a todo ser.
¡Quién fuese el soldado con lanza para,
con tu sangre y agua, menguar la sed¡.
Qué extraño amor, Nazareno.
(Quizás la esencia de tus milagros)
Dándolo todo sin restricciones,
¿en tu orbe, habrá hombres malos?.
Tu energía hace todo posible,
abates nuestros duros glaciares.
Derrítelos con suave dulzura,
para luego formarlos Manantiales.

Perdón Nazareno, por mi exigua fe
no sé como mover montañas.
Tu amor entiende mis mañas.
Soy pescador y te Amo con brutez.