Por fin había encontrado la entrada al volcán, una enorme puerta de plata, el marco de la puerta tenia grabado a su alrededor símbolos de fuego, Valeria la observo por un momento, al parecer no había forma de abrirse, saco su látigo y lo lanzo hacia la puerta en intento de abrirla, pero fue inútil, el látigo reboto contra el metal sin hacerle ni un solo rasguño, Valeria lo volvió intentar con el mismo resultado, se comenzó a desesperar había llegado tan lejos y ahora solo una puerta la detenía, enrollo su látigo y fue entonces cuando se dio cuenta de un a pequeña secuencia de símbolos en el mapa, al estudiarlos mas de cerca se dio cuenta que eran los mismos que en las paredes, se acerco al primero, una ave fénix, y la toco levemente, en cuanto la toco el feliz se ilumino de un tenue color naranja, Valeria retrocedió, y entonces toco el símbolo que seguía, un triángulo, este se ilumino también, siguió así hasta completar el marco, en cuanto hubo tocado otra vez al fénix la puerta se abrió lentamente, frente a ella se abría un amplio pasillo iluminado solo con antorchas, lentamente ella entro, en cuanto hubo entrado la puerta se cerro tras de ella, Valeria tomo valor y siguió avanzando, adentrando se cada vez mas en las entrañas de aquel volcán, justo cuando comenzaba a tranquilizarse, una puerta de metal se abrió a su izquierda, retrocedió mientras sacaba el látigo, de la puerta salió un enorme lobo, el animal era mas alto que ella, su pelaje brillaba como la plata, la miro detenidamente, sus ojos llameaban con odio, Valeria lentamente preparo su látigo, cambiando la punta circular por una triangular, entonces el lobo salto, ella rodó hacia atrás y levanto el látigo lista para atacar, el animal volvió al ataque, sus garras se clavaron el la pared a escasos centímetros de Valeria, ella lanzo su látigo directo hacia el corazón del animal, pero en cuanto le toco la piel el látigo reboto como lo había hecho con la puerta, el lob se volvió a lanzar hacia ella, esta vez con la intención de morderla, Valeria salto hacia atrás y volvió a probar con el látigo, esta vez dirigiéndolo hacia su hocico, el látigo logro golpearlo en la nariz y ante la sorpresa de Valeria el lobo comenzó a sangrar, había dado ya con su punto débil, el lobo retrocedió y Valeria cayo se levanto con intención de golpearlo otra vez, pero el lo fue mas rápido, esquivo su látigo y lanzo una dentellada hacia su mano izquierda, Valeria se intento apartar, pero fue muy tarde, los dientes del lobo se incrustaron en su brazo, antes de que e lob pudiera arrancarle un pedazo Valeria lo golpeo con el látigo, el animal se aparto, Valeria se tambaleo, pero tomando fuerzas lanzo el látigo contra el lobo una vez mas, el lobo lo volvió a esquivar y le lanzo un zarpazo hacia el pecho, ella se tiro al suelo, pero las garras lograron sangrarle debajo de la garganta y al voltear hacia la herida la vio, una pequeña cicatriz en forma de rayo, justo debajo de su garganta y entonces recordó su habilidad, se levanto sonriendo y comenzó a girar rápidamente el látigo alrededor de ella, el lobo se preparo para atacar por ultima vez, el látigo de Valeria comenzó a teñirse de color azul, mientras ella proyectaba una sobre del mismo color, el lobo salto, Valeria detuvo su movimiento y lanzo su látigo hacia el lobo, la punta de color azul atravesó el corazón del animal, el lobo cayo, sacudiéndose como si le hubieran dado una descarga eléctrica, Valeria se desplomo de rodillas, y rompiendo su blanca camisa a la altura de su ombligo, se vendo con esa tela su herida en el brazo, después de trato con el botiquín su herida en el pecho, mientras se curaba el pecho reparo de nuevo en el rayo que tenia en su pecho, una marca que se había hecho ya mucho tiempo atrás.
Todo había pasado hacia ya 7 años, ella tenia 8 años, vivía aun un su pequeña isla de pescadores, con su padre y su madre, eran día tranquilo, pero eso cambiaría pronto, al medio día se diviso un barco pirata acercándose a la costa, el barco pertenecía a un gran pirata llamado Dalí, a su madre le ordeno esconderse en las montañas, poco después de la una de la tarde el barco atraco, todos los habitantes estaban escondidos en las montañas, los piratas desembarcaron y comenzaron saquear la aldea, matando a quien se interpusiera en su camino, valeria disgustada escapo de las montañas y escondiéndose llego al barco de dalí, con la intención de robarle un poco de lo que les había robado, su pequeño tamaño le permitió llegar al camarote de Dalí, donde se encontró un pequeño cofre, en el había varias cosas, un látigo hecho de pequeñas cadenas de metal con una punta de estrella, a su lado había un estuche con capacidad para 3 puntas, una circular, una triangular y una en forme de estrella, Valeria había desmontado la de estrella del látigo ya la había colocado ahí, había también un cuchillo de plata con su funda, un cinturón de cuero con la hebilla de bronce, un botiquín, una pequeña bolsa para cargar el estuche de puntas y el botiquín así como cualquier otra cosa necesaria, una bolsita llena de monedas de oro y un medallón, el medallón la impresiono, hecho de oro puro, en el centro tenia una urna de diamante la cual contenía una sustancia transparente que ella nunca había visto, dentro de esa sustancia se veían rayos, en el medallón había rayos y nombres escritos en plata, Valeria decidió ponérselo después, lentamente se escabullo del barco hasta llegar a las montañas, ahí su madre la había estado buscando desesperadamente, Valeria le mintió diciéndole que había estado en el bosque, los piratas se fueron un poco después y cuando los habitantes comenzaron a volver el barco volvió a aparecer en el horizonte, todos corrieron de vuelta a las montañas, Valeria se fue al bosque, donde se puso a examinar mejor las cosas, decidió conservar todo y fue entonces cuando se puso el medallón, en un inicio no paso nada, pero lentamente valeria comenzó a sentir un ardor ahí donde se lo había puesto, cuando volteo a ver por que le ardía se dio cuenta que el medallas se estaba adhiriendo a su piel, intento arrancárselo inútilmente, pronto el ardor se convirtió en un dolor insoportable, Valeria empezó a gritar hasta que se quedo sin fuerzas, después de un tiempo el dolor se calmo al fin, fue entonces cuando Valeria vio la cicatriz que tendría a partir de ahora en el pecho, aun no sabia que había pasado, guardo lo demás y se apresuro a llegar a las montañas ahí su madre la esperaba, estuvieran escondidas ahí una semanas mas, hasta que los piratas se fueron, entonces bajaron al pueblo, este estaba devastado completamente, en el puerto habían dejado clavado en un poste una nota que explicaba lo que era el collar, al leerlo Valeria se entero de lo que era, su collar era una rara reliquia, los llamaban los "collares de Neptuno", estos se encontraban en los grandes tesoros y daban habilidades especiales a sus portadores, solo se podía poseer un collar pues si un portador se ponía un segundo moriría al instante, ahí Valeria se dio cuenta que tenia el collar del rayo, este le permitía ser el rayo, la electricidad, desde entonces había ido al bosque a entrenar, mejor su habilidad durante 3 años, hasta que un día su padre la encontró, al verla usar su habilidad su padre se había horrorizado y después de golpearla le había prohibido volver a utilizar esa clase de habilidades en su vida, Valeria había obedecido, pero ahora en sus 15 años, esa joven de cabello negro, estatura baja, facciones finas y ojos ambarinos no tendría que obedecer esa orden nunca mas.
Un ruido la saco de sus pensamientos, la puerta de metal de donde había salido el lobo se había vuelto abrir, sin embargo esta vez, no salió nada, Valeria se puso de pie y se acerco hacia ella, su cuerpo emitía una suave luz azulada, entonces Valeria entro a la siguiente sala del volcán dispuesta a tomar el tesoro ahí escondido.
Mientras tanto del otro lado de la isla un barco atraco, era un barco pequeño, de el bajo un joven con un mapa en su mano izquierda y una enorme espada en la derecha, guardo el mapa y tras acomodarse sus lentes comenzó a andar en dirección al volcán. |