Ella llora solo de noche,
Así siente que nadie la escuchará,
Ella llora solo de noche,
Pues en el día no hay quien la quiera
consolar,
Sus lágrimas podrían armar el más
profundo océano,
La palidez de su rostro bien lo podría
alumbrar.
Como cuando la luna ilumina su
tristeza;
Ha sido la única testigo de cómo no
para de lamentar.
Sus sollozos armarían un concierto
Donde hasta el payaso más feliz
sufrirá;
Su dolor es tan infinito, pobre niña,
Infeliz parece que siempre será.
De su vientre dejo salir un ángel,
Se elevó hasta donde no lo pudo
alcanzar,
Dejo en su interior un vacío enervante,
Nunca se podrá llenar.
Decisiones que llegan a terminar de
una manera muy dolorosa;
Jamás se imagino que tanto tiempo
podría lastimar,
De idiota no la baja nadie,
Pues quien es tan tonto,
Para dejar un ángel escapar.
Pobre tonta, solo llora de noche;
De día, nadie la quiere escuchar;
Pues quien quisiera escuchar un
lamento,
De esos que no tienen final.
Llora pobre idiota,
Llora cuando la luna te pueda iluminar;
Nadie quiere ver lágrimas,
De aquellas que nadie puede
derramar.
Lamenta el día en que decidiste
condenarte,
Lamenta el día que no podrás revivir,
Lamenta también en las tormentas,
Cuando la energía eléctrica se esfume,
Para que no te veamos llorar.