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Inicio / Cuenteros Locales / Hanyoudem / Romeo & Cinderella - Los días que pase contigo(6)

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Mentiras piadosas

Sexta parte de mi serie, si les agrada comenten me ayudarían a mejorar (Si no les agrada también) y si gustan compartan. Sí quieren leer mas, el resto de los capítulos están en mi perfil. Se agradece el tiempo que invierten leyendo esto.

Se abre el telón, y en primer plano tenemos la imagen del amanecer, con un cielo nuboso y rojizo. La cámara hace un recorrido por las calles de la ciudad. Las personas salen de sus casas con chamarras y suéteres, asumimos que es una mañana fría. Varias personas suben a los camiones, otras van en autos, y algunos simplemente prefieren o tienen que caminar. Las tiendas comienzan a abrir, y el bullicio de cada día comienza. Todo esto mientras el sol avanza.

Santiago (Voz en Off): ¿Les ha pasado que no saben qué decisión tomar? (Pausa esperando respuesta) Es decir, están atrapados entre: Lo que deben hacer y lo que quieren hacer (Pausa) Pues en realidad pienso que es algo que pasa muy seguido, y aún más cuando tienen que escoger entre: Quedarse o Dejar algo que quieren.

La escena ahora cambia y se centra en Santiago quien va saliendo del baño con solo una toalla envuelta de la cintura hacia abajo, tiene el cabello mojado y algunas gotas por el cuerpo, se comprende que sale de bañarse. El reloj marca las 11:15 am. Sube las escaleras a su cuarto, se le nota pensativo, el joven mira el calendario en la pared, es sábado, entra a su cuarto y cierra la puerta. La cámara queda fuera de la habitación.

Santiago (Voz en Off): Aun recuerdo que en ese tiempo había demasiadas cosas que desconocía, actuaba por actuar, y no me detenía a pensar ni un segundo mis acciones. Como ya les dije; Yo solo lastimaba a las personas que quería, o eso solía pensar, ahora sé que solo eran las consecuencias de mi tonta manera de actuar.

Vemos ahora salir a Santiago de su cuarto, se está colocando la camisa mientras sale. Su cabello aun esta mojado y baja para poderse peinar. La cámara lo sigue mientras hace su rutina: Lavarse los dientes, peinarse, terminar su aseo personal.

Santiago (Voz en Off): Pero al crecer te das cuenta de que todos cometemos errores… Es parte del día a día de la vida… Hasta para aprender a caminar te tienes que caer…

La escena ahora cambia, vemos a Santiago sentado en la sala de su casa aparentemente no hay nadie, él sigue con la mirada perdida, toma el celular del bolsillo de su pantalón, entra en el menú “Contactos” y se detiene en el que dice “Jennifer”, duda un poco pero al final decide llamar. Suelta un suspiro algo amargo, y coloca el celular en su oído. Escuchamos el tono de llamada, hasta que por fin alguien contesta, es un “Hola” con una voz muy dulce. El joven lo duda un poco pero contesta.

Santiago: Hola ¿Interrumpo algo? (Algo serio).

Jennifer: Sabes que no Amor, tu nunca interrumpes
nada (Su tono es de felicidad).

Santiago: Esta bien… (De manera bastante seca).

Jennifer: ¿Ocurre algo? ¿No suenas bien?

Santiago: No, no es nada (Cierra los ojos y se decide a hablar) Bueno en realidad ¿Podemos salir hoy? Quiero verte…

Jennifer: (Feliz) ¡Claro que sí! Ya me habías preocupado tonto ¿A qué hora?

Santiago: A la una estaría bien, iré por ti a tu casa.

El joven cuelga rápido la llamada sin darle tiempo a la niña de contestar, hace un gesto de inconformidad y suelta otro suspiro algo amargo. Se levanta de la sala y se dirige a su cuarto de nueva cuenta. Su rostro luce confundido, y nos da pauta a saber lo que piensa.

Santiago (Pensamiento): ¿Qué estoy haciendo? Ella es mi vida, no sé cómo fui tan idiota, tal vez si no digo nada, no es mentir, solo no le diría lo que paso… Y todo estaría perfecto… No tiene por qué volver a pasar… Un desliz lo tiene cualquiera… (Se sacude la cabeza) ¿Pero qué demonios estoy diciendo? Tengo que acabar con esto… Y terminar con ella… Eso es lo correcto… Solo debemos tomarnos un tiempo… Eso es todo… Yo la Amo? Solo necesito ordenar mis pensamientos y dejar de comportarme como un reverendo imbécil…

El joven niño se sienta en su cama observando por su ventana el cielo como es su costumbre. La hora en el reloj marca las 11:55am, y se recuesta para seguir observando, parece que solo espera a que llegue la hora. En un acto de ociosidad prende la televisión y comienza a hacer zapping (Cambiar de canal sin poner mucha atención) Se detiene un momento, en “Cartoon Network” están pasando “Naruto”, lo duda un poco pero al final decide dejarlo y verlo. Por alguna extraña razón comienza a sonreír impulsivamente.

Santiago (Pensamiento): Es cierto… Tengo que ir a verla a las 6:00pm como todos los días… Eso significa que no podre estar mucho tiempo con Jennifer… Tal vez sea lo mejor, debo terminar con esto rápido… ¡Sí! Como quitarse un curita… (Su rostro se ilumina esperando una sonrisa, pero rápidamente se ensombrece golpeando con su mano su frente) Debo dejar de hacer chistes malos en una situación así.

La cámara enfoca la ventana y se pierde en el cielo por un momento. Ahora en primer plano esta la casa de Santiago. La cámara entra por la ventana y se enfoca en el reloj de la sala, éste marca las 12:45pm, se puede escuchar algo de música proveniente del piso de arriba. La escena se centra en el pasillo y vemos a Santiago bajando las escaleras, se coloca los audífonos y guarda su celular en el bolsillo. La cámara enfoca el exterior de la casa y vemos salir al joven, éste comienza a caminar, asumimos que en dirección a la casa de Jennifer. El sol está en su punto más alto, y ocasionalmente es opacado por alguna nube. La cámara se centra en Santiago que mira el cielo como buscando respuestas divinas. El joven sigue caminando por la calle sin dar vuelta, solo camina en línea recta por la banqueta, con la mente perdida en la música. Por fin después de algunas calles llega a una casa de color rosa con blanco, se acerca a la puerta y con algo de duda toca el timbre. De ese lugar sale Jennifer, lleva puesta una blusa de color negro con blanco, jeans y tenis. La linda chica rodea con ambos brazos el cuello del joven y lo besa tiernamente. Él por su parte se sorprende un poco pero corresponde tomándola de la cintura.

Jennifer: ¡Qué bueno que llegas Amor! (Sonriendo y sin soltar a Santiago).

Santiago: Siempre llego (Sonriendo).

Jennifer: ¿Quieres pasar? (Se le nota animada).

Santiago: Mmmm ¿No hay nadie en tu casa?

Jennifer: Mmmm no, mi hermana salió y mi madre trabaja hoy, estamos solos (lanzando una mirada cómplice.)

Santiago: Hehe (algo apenado) Ok entremos…

La linda joven toma de la mano al chico y ambos entran a la casa, la cámara ve la puerta cerrarse detrás de ellos, la escena se funde en negro por un momento para después ver a ambos sentados en la sala de la casa de Jennifer. La chica esta recostada sobre el hombro del joven, ambos miran la televisión, por el momento no identificamos el programa. Santiago mira su celular que marca las 4:30pm y Jennifer solo está mirándolo fijamente.

Jennifer: ¿Qué tienes? (Espera respuesta pero solo obtiene una sonrisa) Estas muy callado.

Santiago: Lo siento, no te preocupes por eso (Se acerca y la besa tiernamente en los labios).

Jennifer: (Con una mirada acusadora y graciosa en el rostro) ¡No intentes callarme!

Santiago: Jajá no lo hice por eso…

Jennifer: ¿Entonces?

Santiago: Lo hice porque me gustas niña loca… (La vuelve a besar, solo que esta vez es un beso más intenso).

Jennifer: Tu a mi… (Continúan y ella lo toma de la mano).

Ambos continúan haciendo muestras de cariño mutuo (besos, caricias) y el ambiente se comienza a llenar tanto de hormonas que se puede cortar (literalmente). Jennifer esta sobre Santiago quien aún sigue sentado en el sillón, la respiración de ambos está muy agitada y su besos son cada minuto más apasionados. Sus jóvenes energías están a tope, y ambos han dado rienda suelta a su deseo, las caricias suben de tono igual que ellos, y justo cuando parece que ambos han hecho demasiado para su edad, la voz de Jennifer vuelve a romper el silencio.

Jennifer: ¿Quieres subir? (Aun agitada).

Santiago: (La mira algo sorprendido) ¿Ahora?

Jennifer: ¿No quieres? (Santiago solo se limita a mirarla y no responde) Anda… No hay nadie en casa… Estamos solitos tu y yo (Su voz es muy
provocativa y su mirada seductora).

Santiago: Hehe lo se… Pero es tarde y debo irme pronto lo lamento (La chica lo mira extrañada, pero antes de que ella pregunte Santiago se adelanta a hablar) Lo que pasa es que tengo un compromiso…

Jennifer: Mmmm (No está muy convencida pero cambia su expresión) Si es con tus amigos, vamos los dos, también son mis amigos ¿Recuerdas?

Santiago: No, no es con ellos… (Baja la mirada)

Jennifer: (Buscándole la mirada) Sí fuera con tu familia no me dejarías aquí (Tomando con sus manos el rostro del chico, mirándolo fijamente y esmerando una sonrisa) ¿Dime con quien vas?

Santiago: (Con un tono de burla) Vamos… No me dirás que estas celosa ¿O sí?

Jennifer: Es con tu nueva amiga ¿Verdad? (Sin perder la sonrisa)

Santiago: ¿De qué hablas? (Algo sorprendido)

Jennifer: Jajá vamos Amor no le quieras vender chiles al Clemente Jacques (Con el mismo tono de burla de Santiago) Sí me dices que saldrás con ella porque lo prometiste no hay problema… Entiendo de hecho… Pero no quieras ocultarme nada… Sabes perfectamente que no puedes Amor.

Santiago: (Algo inexpresivo) Lo siento, debí
decírtelo…

Jennifer: Ve, pero con una condición ¿Ok?

Santiago: ¿Cuál? (Parece que la sorpresa no quiere abandonar su rostro)

Jennifer: Preséntame a tu amiga algún día ¿Vale? (No obtiene respuesta) No hoy, estoy segura que sería incomodo, pero quiero conocerla pronto.

Santiago: Si, lo hare ¿Segura que no hay problema?

Jennifer: Jajá no, claro que no, no es para preocuparme ¿O si lo es?

Santiago: Jajá… No claro que no…

Jennifer vuelve a besar a Santiago tiernamente, la escena se funde en negro por un momento. Ahora en primer plano esta Santiago caminando rumbo a su casa, su reloj marca las 4:35pm, se ve algo apresurado pero pensativo, se detiene unas calles antes de llegar a su casa y espera (Asumimos que espera algún tipo de transporte) Por un momento podemos escuchar sus pensamientos.

Santiago (Pensamiento): Vaya… Después de todo no tuve el valor para terminar con ella, es una molestia no haber acabado con esto… No debe ser un problema… La quiero, eso no va a cambiar nunca… Por ahora lo que más me preocupa es saber quién le dijo… Nadie más debería saber de Yessenia… Solo yo y… (Su expresión cambia) ¡Omar!

El joven toma su celular y busca en los contactos, obviamente está llamando Omar. Se le nota molesto y desesperado, se exageran los tonos del celular, tanto que los podemos escuchar. Después de cuatro tonos contesta y escuchamos su voz.

Omar: Hola Near ¿Qué ocurre?

Santiago: Oye ¿Puedo preguntarte algo? (Su voz es
muy seria)

Omar: Claro… Dime…

Santiago: ¿Le dijiste a alguien sobre Yessenia?

Omar: Mmmm tu nueva amiga ¿Verdad? (No obtiene
respuesta) Sabes que no le he dicho a nadie, no tengo porque divulgar tu tonta vida amorosa…

Santiago: (Hablando tajantemente) Jennifer se enteró de Yessenia

Omar: Eso no es posible…

Santiago: Solo tú y yo sabíamos…

Omar: Eso ya lo sé… Tal vez escucho la conversación que tuve contigo

Santiago: La única vez que hablamos de ella en la fiesta fue en… (Su expresión cambia a preocupación)

Omar: Si… Cuando la estabas engañando con Karen… Y si ella sabe de Yessenia… Es probable que sepa lo que hiciste…

Santiago: (Resopla un poco) No me ha dicho nada… Tal vez no se ha enterado…

Omar: En fin ¿Qué te dijo?

Santiago: Te cuento luego tengo que irme

Omar: Esta bien… Hasta luego…

La llamada se corta y vemos un camión detenerse enfrente de Santiago, éste aborda el transporte, paga su pasaje y toma asiento junto a la ventana. Vemos al joven colocarse los audífonos mientras su mirada se pierde en el cielo, se le nota muy confundido, pero, por alguna razón esmera una sonrisa, recarga su cabeza contra el vidrio y la escena se funde en negro. La escena cambia ahora está el joven sentado en la banca del parque donde suele esperar a Yessenia, se le ve tranquilo, casi como si estuviera durmiendo, no está enterado de nada de lo que pasa a su alrededor pues tiene los auriculares puestos. La cámara hace un acercamiento a su cabeza, y de pronto vemos que alguien los golpea en la nuca, no es un golpe fuerte, es solo para despertarlo, y funciona muy bien, el voltea la vista arriba un tanto desconcertado y ve a Yessenia quien ahora no lleva su típico uniforme, pero si lleva una falda y una blusa de azul que le queda bastante bien. El joven no puede evitar sonreír.

Yessenia: ¡No te duermas! (La niña pone una sonrisa muy linda).

Santiago: Hehe no tenías que hacer eso… (Devolviendo la sonrisa).

Yessenia: Jaa lo siento niño, bueno dejemos eso ¡¿A dónde vamos?!

Santiago: (Gesto de sorpresa exagerado) Aaa… Eres rara…

Yessenia: (Agachando la cabeza y con voz baja) Lo sé (Levantando la mirada y con un tono alegre) Jaa ¡Y no importa! ¡Tú también eres raro!

Santiago: (Con un gesto extrañado y tono sarcástico) ¿Yo?

Yessenia: Jaa ¡Claro que sí! Sí no fueras raro no te hablaría

Santiago: (Con mirada acusadora) No sé si molestarme… O reírme de lo que me acabas de decir…

Yessenia: Jajajaja ¡Baka!

Santiago: (Con mirada acusadora) ¡No estoy gordo ¿O sí?!

Yessenia: Jajajaja no tonto… Baka significa Tonto

Santiago: (Levantándose de la banca rápidamente)
Ok… ¿Quieres pelear verdad?

Yessenia: Hay ene tu siempre me diviertes…

Santiago: Jajaja ya dejemos eso y vamos que se hace tarde…

Yessenia: Mmmm es cierto… ¿A dónde quieres ir?

Santiago: ¡Yo no voy a decidir nada! Tú me invitaste a salir recuerdas

Yessenia: Mmmm ok… Pero tú invitas…

Santiago: (Con sarcasmo) ¿Estas segura que no sales perdiendo?

Yessenia: Chaa ¡Vamos andando no te quejes! (Lo toma de la mano y comienza a caminar por delante, parece como si lo fuera jalando)

Santiago: Eee… (Se le nota apenado) Yenia…

Yessenia: (Voltea y le sonríe) ¿Qué pasa?

Santiago: No… (Recuperándose un poco) No es nada… (Se pone a la par de la chica) ¿Entonces? ¿A dónde vamos?

Yessenia: Solo confía en mí (Ambos se miran el uno al otro).

Santiago (Voz en Off): Saben… Esa última frase de Yessenia se quedó grabada en mi mente de por vida… Era la primera vez que una niña me hacía sentir seguro de algo a su lado… Quería estar con ella… Me sentía bien cuando estábamos juntos… Como si ella fuera mi complemento, es algo extraño de definir a decir verdad… Pero algo era seguro, Yessenia tenía algo que me gusta y ya lo había aceptado… Quería estar con ella siempre…

FUNDIDO EN NEGRO.

Texto agregado el 15-06-2012, y leído por 129 visitantes. (2 votos)


Lectores Opinan
28-09-2012 nesecito mas sigue escribiendo esa historia :D mizok
 
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