Donde te encontraste viajero Con don Jeremías Robles Sabes que al fallecer su amada Se marcho solo y muy triste Sí, yo lo encontré en la cumbre Muy cerca de las altas montañas Bajo los copos de nieve y granizo Trataba de enterrarse y morir No te conto de su dulce amante Por aquella que lo acompaño Con hambre y con frio lo ayudo a penar Con hambre y con frio lloro con el En sus ojos se acabaron las lágrimas Su corazón se seco con el sufrimiento Los vientos fúnebres ahora viajan con el Posiblemente sin saber adónde.
Texto agregado el 30-05-2012, y leído por 200 visitantes. (1 voto)