Vienes hacia mi y me dejas me incitas a seguirte provocas me sumerja en tus entrañas frías y húmedas Me hablas con silencio me gritas al alma y luego callas y me hipnotizas con tu callar y gritar constantes Tienes entre tu piel las figuras mas hermosas brillantes ondas de luces que te hacen única y majestuosa Pero ¡hay del hombre! que se sumerge en ti y no te oye ni mira ¡hay del hombre! que te mata.
Texto agregado el 24-05-2012, y leído por 193 visitantes. (3 votos)