13/09/07
Tengo que reconocer que alguna vez perdí de tanto ganar, no me di cuenta que en mi laberinto de audaces malcriadezas y blasfemias se cruzaría un personaje desdeñoso que reflejaba sus letras en mis ojos y heme aquí, recordando las vulnerabilidades humanas de las que no quise formar parte, preguntándome ¿Porque hice todo lo contrario a lo que dije un día? ¿Por qué mis sandeces tienen magia?
Un día estalló un explosivo de sensibilidades reprimidas e insulsamente se hicieron públicas como “filosas navajas” yo que profeso mi maldad por el mundo, rememoro que un día ande de débil con descaro…

Tanta discrepancia en mi cerebro, debido a mis esquizofrenicas demostraciones de alboroto mental divulgada por estos y otros lugares.
Pero irónicamente, pensar en Vos y el contexto que me rodeaba en esos tiempos, es creer que hay porque reír, que mi situación mental no era tan grave, como la del país…

Ahora solo me queda disfrutar tu ausencia, que cruelmente la esperaba, para deleitarme a plenitud con mis monerías, tus monerías, las de la muchedumbre e irreversiblemente una vez más, asertivamente creer que el tiempo sirve para reírse atrevidamente de las debilidades pasadas, pero….

Aunque no estés conmigo, para pasar a dimensión desconocida
Siempre recordare, que por tu causa…
Las hecatombes maquiavélicas explotaron en mi cerebro drogadicto un día
Y que las substancias de orgullo que me he tragado, desde que sé que existo no sirvieron de nada cuando te conocí
Y que un día pretendí desvergonzadamente que no pertenezcas a cualquiera,

Y definitivamente jamás olvidare
Que paralicé la lluvia de una noche
Para iniciar una tempestad trivial en mi existencia
Por algunos insomnios que te he dedicado
Por hacer catastrófica, la trágica, exagerada y desastrosa manera de escribir mis letras, cuando me sorprendió la infamia de tu existencia, en un lugar como este, construido substancialmente para sensiblerías baratas
Ahora solo me queda decir:
Que esa palabra “Amor” deja cierta impresión mentirosa, que engaña al momento y como un carnicero lo dijo: “después de descuartizar a una vaca, el oficio del amor es una mentira…”