Una sensación socaba mi paciencia En el caldo de mi morada Cortinas loan como cuerdas de guitarra La incertidumbre me desgarra. Mi repisa llena ida de libros Tiza en la mesa de luz Resplandece la luna en mi negra cama. Como siempre el tiempo escasea Debe haber otra vuelta Con un presente de oportunidades. En el paramo escrutado Se raja la tibia raíz La aljaba se derrite y la pesuña De mi guía se hunde trituradora. Así que déjame marchar No tenías nada para decir Vete antes que lo sepa No puedo destruir lo que no existió Siempre lo supe y nunca me importo.
Texto agregado el 19-05-2012, y leído por 129 visitantes. (3 votos)