Cual naciente alborada emerge del horizonte, iluminando la senda del viejo caminante. Al silencio lo calla para que el viento hable con el aroma de esperanza por el pedregoso valle. Corta la espinosa zarza sedienta de sangre, con el beso de vida que ahuyenta a la muerte. Y al caer la tarde ilunina a la Luna para que la luz no falte hasta que llegue el alba. Rosa de luz Joan © Bosch 17/05/12
Texto agregado el 17-05-2012, y leído por 104 visitantes. (5 votos)