Anoche soñé con viejas canciones, 
con los vestigios de un parque urbano, 
y con todo lo que no hallo en los sueños, 
por esa sensación, equívoca, en la que crees 
que, eso, te esta realmente sucediendo. 
Pero luego te descubres, concluyente, 
con una larga y  turbulenta confusión, donde, 
el señor destino solemnemente te dice: 
“despierta, basta de recuerdos” y es el final 
de ese torbellino que a ojos cerrados vivimos. 
Por lo tanto ahora, como otras veces, pienso 
que son mejores los días que paso despierto, 
con el sol dándome en la cara, transitando 
ese primer paso al extravío que es vivir, 
gozando los momentos especiales que guardan, 
en su último recorrido, sabor a ti.  |