Inicio / Cuenteros Locales / daicelot / Diecinueve de septiembre
Hace poco este blog cumplió siete años. Muchas cosas pasaron en esos siete años. Si fuera un niño, ya estaría en segundo básico y leyendo sus primeros libros. Esta sería la entrada de los siete años y un mes. No es "sería", sino "es". Lo que pasa es que al momento de escribir esto aún no sé si será un nuevo post de tantos que han habido antes, o bien el reflejo de un cansancio profundo que ha mutilado otros intentos.
Para la equivalencia con la edad de los humanos, a los perros se les multiplican los años por siete. A los blogs se les multiplica por doce. Con ochenta y cuatro años cuesta seguir al ritmo de los otros. Duelen las piernas. El corazón está débil. Ainoricismos sigue vivo como un viejo sentado en una silla espiando por la ventana. A ver si transcurre algo más de vida, o si se trata sólo de esperar en silencio la llegada de más silencio.
Técnicamente aún hay aire en sus pulmones. Aún es capaz de mirar, si se esfuerza, el paisaje encementado de la calle en la que vive. El paisaje monótono y archiconocido, las mismas grietas en la vereda, los mismos arbustos descuidados. Si se incendiara su casa, Ainoricismos moriría sin llamar a los bomberos. No tendría sentido, ya que el grifo del frente hace tiempo que está seco.
19.9.11
|
Texto agregado el 02-05-2012, y leído por 148
visitantes. (0 votos)
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login
|