Es fácil molestar a la gente. No tienes que saber nada. Sólo tienes que burlarte de lo que ellos creen. Todos creen en algo. Pero estamos tan limitados que no sabemos defender nuestras convicciones. No hay manera. Burlarse de dios ya es un viejo truco. Burlarse de los comunistas es fácil también. Burlarse de los que creen en el amor, o los que creen que la vida es bella, o los que creen en un mejor mañana. Todos los días vemos cómo la gente se hiere con simples palabras. Acerca del uso del condón o acerca del aborto, acerca de la política o del fin del mundo, acerca del fútbol. A veces involuntariamente se dan estas cosas. Yo sólo quiero decir que mi opinión no vale, es estúpida, y sé que es incorrecta, pero aún así voy a decirla, sólo porque no tengo nada mejor que hacer. Nada nos va a salvar de la muerte, y nadie resolverá nuestros problemas. La vida es agobiante de todos modos. Aunque tu equipo gane, aunque el político del que eres simpatizante gane, aunque consigas la mujer que amas, aunque tengas dinero. Claro, se pueden pasar buenos ratos, pero no importa. En el fondo tenemos la esperanza de que no vamos a morir. No creemos en dios pero decimos que la vida es bella a pesar de tanto sufrimiento. Con cualquier cosa nos conformamos y decimos que somos felices y reímos enfrente de los desdichados, sin pensar que terminaremos igual de desdichados si no es que alguien nos salva. Por ejemplo, yo puedo decir que son unos idiotas todos los que se casan, por esto y por aquello, y tengo razón. También puedo decir que en las próximas elecciones va a ganar el peor y que no podremos evitarlo. Eso le molesta a la gente. Pero no es mi intención. Yo sé que soy un idiota al igual que todos. Tengo mis esperanzas también, y también son estúpidas. A veces le pido a dios que me ayude cuando estoy en problemas. Cuando alguien se burla de los católicos me duele. Cuando las mujeres hablan de sexo no me gusta. Yo sé que nada de eso importa. Ni siquiera tenemos que darle importancia. Pero ahí están esas cosas y se van acumulando y nos van enloqueciendo. A favor o en contra de esto, a favor o en contra de lo otro, comunista, socialista, anarquista, monárquico, demócrata, republicano, homofóbico, aborto no aborto, ponte a trabajar.